La hemiparesia no es una enfermedad, es una condición neurológica que dificulta el movimiento de una mitad del cuerpo (de ahí lo de “hemi”) pero sin llegar a la parálisis total.

El cerebro tiene dos mitades o hemisferios (izquierda-derecha); cada hemisferio del cerebro

controla la mitad contraria del cuerpo; se identifica la hemiparesia como “izquierda” o “derecha” en función de la mitad del cuerpo afectado y no en función de la localización de la lesión cerebral.

Así, hablamos de hemiparesia “derecha” cuando la afectación dificulta el movimiento de la mano y/o pie derechos, aunque la lesión esté en el hemisferio izquierdo del cerebro, y viceversa.

La hemiparesia infantil es una forma leve de la parálisis cerebral infantil (“PCI” o “PC”), que es el término genérico que se utiliza para designar todo un grupo de trastornos del desarrollo del

movimiento y la postura, causantes de limitación de la actividad, con múltiples causas, y que son atribuidos a una agresión no progresiva sobre un cerebro en desarrollo, en la época fetal o

durante los primeros años de la vida.

¿QUÉ HACER UNA VEZ NOS HAN CONFIRMADO EL DIAGNÓSTICO?

Una vez más tenemos que hablar de la atención temprana y de la importancia que tiene que exista un diagnóstico precoz. La plasticidad cerebral presente durante los primeros años de vida de nuestros peques, permite que, con una correcta intervención, en este periodo se establezcan en su cerebro nuevas y más fuertes conexiones que le permitan recuperar y mejorar la actividad y función del hemicuerpo afecto.

Un niño o niña con hemiparesia infantil y su familia necesitarán una atención global y especializada que permita abarcar las diferentes áreas de su desarrollo que se puedan ver afectadas y que potencie al máximo sus capacidades para alcanzar la máxima función y participación en la comunidad y el entorno.

Según una revisión científica de reconocido prestigio realizada por Novak et al. Las intervenciones que han demostrado ser efctivas en los niños/as con hemiparesia son:

FISIOTERAPIA Y TERAPIA OCUPACIONAL

– El entrenamiento dirigido al objetivo destinado al desempeño funcional de una actividad.

– Los programas domiciliarios y terapias basadas en el contexto también destinadas al desempeño funcional de una actividad.

– La terapia ocupacional (en combinación con la aplicación de toxina botulínica) con el objetivo de mejorar la función manual y el desempeño funcional de una habilidad.

– La aplicación de terapia restrictiva y terapia bimanual permite mejorar la función manual.

– El entrenamiento de la marcha en cinta rodante permite mejorar la calidad de la marcha, su velocidad y cadencia de paso así como el equilibrio.

– El entrenamiento de fuerza y la electroestimulación para mejorar la fuerza muscular.

– La utilización de órtesis de inmovilización para reducir o frenar la contractura.

– El empleo de órtesis tipo DAFO para evitar la aparición de acortamientos y mejorar la calidad de la marcha.

– La intervención temprana con el objetivo de favorecer la adquisión de los hitos y habilidades motrices gruesas y la función manual.

– El empleo de biofeedback y la realidad virtual en la terapia también obtiene buenos resultados en la mejora de la función manual.

LOGOPEDIA

– Tratamiento miofuncional de la musculatura orofacial.

– El empleo de tecnologías de asistencia que facilten el proceso de comunicación y escritura.

PSICOLOGÍA

– La terapia cognitivo-conductual para manejo de la depresión, la ansiedad y el dolor. El soporte conductual positivo destinado a manejar la conducta del niño/a.

En Bambáns contamos con un equipo de especialistas en el tratamiento de patologías de la infancia como la hemiparesia, dispuestos ayudarte a ti como familia y a los más peques durante toda su infancia. Aquí estamos esperándoos.

Referencias: Novak, I. Evidence-Based Diagnosis, Health Care, and Rehabilitation for Children With Cerebral Palsy. Journal of Child Neurology 2014, Vol. 29(8) 1141-1156

Autora: Nerea Rodríguez Davila. Fisioterapeuta.

Nº Colegiada: 2982